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Una pareja adinerada de West Virginia ha sido acusada de obligar a sus hijos adoptados a vivir y trabajar en condiciones de esclavitud en su propiedad en Sissonville.
Los acusados, identificados como Donald Ray Lantz, de 63 años, y Jeanne Kay Whitefeather, de 62, se declararon no culpables de más de una docena de cargos relacionadas con las condiciones deplorables en las que vivían los niños, con edades comprendidas entre 6, 9, 11, 14 y 16 años.
Las víctimas fueron encontradas por la policía en octubre durante un control de bienestar. Según los informes, los niños estaban viviendo en un cobertizo en ruinas, vestidos con ropa andrajosa y obligados a trabajar en las tierras agrícolas de la pareja, informó MetroNews.
“Trata de personas, violaciones de derechos humanos y uso de trabajos forzados”, fueron las descripciones de la jueza del circuito del condado de Kanawha, Maryclaire Akers, al tribunal. “Violaciones de derechos humanos específicas del hecho de que estos niños fueron atacados debido a su raza y fueron utilizados básicamente como esclavos, según lo que alega la acusación”.
Asimismo, los cargos contra la pareja incluyen tráfico de personas de un menor de edad, uso de un menor de edad en trabajos forzados y negligencia infantil que crea un riesgo sustancial de lesiones corporales graves o muerte.
La pareja fue arrestada después de que un vecino realizara una llamada de bienestar infantil, afirmando que dos adolescentes estaban encerrados en un cobertizo en la casa de la pareja en Sissonville, según los informes: “Los vecinos también informaron que los niños fueron obligados a realizar trabajos agrícolas y no se les permitió entrar a la residencia”, según el documento, que fue publicado por WCHS.
La policía encontró a un niño de 14 años y a una niña de 16 encerrados en el cobertizo. En el lugar había un pequeño orinal portátil para vehículos recreativos, pero no había luces ni agua corriente. Uno de los adolescentes le dijo a la policía que habían estado encerrados en el granero durante 12 horas cuando los alimentaron por última vez.
Los dos dijeron que sus padrastros los obligaron a dormir en el piso de concreto sin colchones. La niña llevaba zapatos mientras que el niño de 14 años tenía “llagas abiertas en sus pies descalzos”, según documentos judiciales.
Del mismo modo, la policía encontró a una niña de 9 años dentro de la residencia principal. Tres horas después, llegó Lantz con un niño de 11 años. Whitefeather pronto lo siguió con una niña de 6 años que había estado con unos conocidos. Los niños describieron abusos continuos en la casa de Virginia Occidental y en la otra residencia de sus padres en el estado de Washington.
Los fiscales también dijeron que tienen evidencia de que la pareja se mudó desde Washington después de enterarse de que estaban bajo investigación por abuso y negligencia. La investigación continúa y se espera que se presenten más detalles en las próximas semanas.
