Juez en Texas bloquea plan de Joe Biden para regularizar a medio millón de indocumentados
27 de agosto de 2024
Latino ahorró 5 años en EE.UU., envió el dinero a sus padres y ellos tomaron la peor decisión
30 de agosto de 2024
La Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Allegheny buscará la pena de muerte contra Nicole Elizabeth Virzi, de California, quien fue acusada de matar al hijo recién nacido de su amiga en junio y lastimar a su gemelo. Si la mujer resulta culpable, se convertiría en la primera en estar en el corredor de la muerte en Pensilvania.
Nicole Virzi, de 30 años, originaria de San Diego, California y quien estudiaba una maestría en la Universidad, se encuentra detenida sin derecho a fianza en la cárcel del condado de Allegheny, luego de ser señalada como la presunta responsable de la muerte de Leon Katz, de 6 semanas, el 15 de junio.
Acusada de homicidio, agresión agravada y poner en peligro a un menor
La oficina del fiscal puntualizó que Virzi renunció a su audiencia preliminar el mes pasado, y a finales de la semana anterior fue acusada formalmente de los cargos de homicidio, agresión agravada y poner en peligro a un menor. La mujer no estuvo presente en el tribunal para la acusación formal.
A pesar de que Nicole Virzi no tiene antecedentes penales, si un jurado la declara culpable de los cargos que se le imputan, esas condenas contarán como antecedentes penales a los efectos de la sentencia.
La ley de Pensilvania incluye 18 factores agravantes que los fiscales pueden citar en su búsqueda de la pena de muerte. En el caso de Virzi, la oficina del fiscal citó cuatro, según compartió Pittsburgh Post-Gazette.
Y los cuales son: el acusado cometió el asesinato mientras perpetraba un delito grave; el delito se cometió mediante tortura; la víctima era menor de 12 años; y el acusado tiene un historial significativo de condenas por delitos graves que involucran el uso o la amenaza de violencia.
Cuidaba a los hijos de su amiga
Nicole Virzi estaba cuidando al bebé Leon después de que sus padres y amigos, Ethan Katz y Savannah Roberts, llevaran a su hermano gemelo, Ari, al hospital por lesiones en su cuerpo, de las que también se acusó a la mujer, informó Pittsburgh Post-Gazette.
Según documentos oficiales dictan que Virzi llamó al 911 alrededor de las 11:15 p. m. del 15 de junio para informar que Leon se había caído de una silla rebotadora, y se había golpeado la cabeza, además de estar perdiendo el conocimiento.
Leon, de 6 semanas de nacido, fue llevado al Hospital Infantil y declarado muerto a la mañana siguiente, comentó el mismo medio de comunicación. La oficina del médico forense dijo que el niño había sufrido una fractura de cráneo grave y múltiples hemorragias cerebrales, según la denuncia.
Traumatismo contundente en la cabeza
“Las lesiones eran consistentes con haber sido sufridas como resultado de abuso infantil, ya que se trata de lesiones infligidas que no son naturales ni accidentales”, reveló el forense, informó WTAE.
El médico forense del condado determinó que la causa de la muerte de Leon fue un traumatismo contundente en la cabeza. Leon sufrió una fractura de cráneo grave en el lado izquierdo de la cabeza, junto con múltiples hemorragias cerebrales.
La policía señaló que Nicole Virzi no tenía una explicación para la gravedad de las heridas de Leon. Dijo que encontró a Leon tendido sobre su lado izquierdo en el suelo con un gran chichón en la cabeza.
Los detectives escribieron en la denuncia que son aproximadamente 45 centímetros desde el punto más alto del asiento de la silla rebotadora hasta el suelo.
Su gemelo con graves heridas
Pero además, los médicos le proporcionaron a los investigadores que el gemelo de Leon, Ari, tenía pequeños rasguños en ambos lados de la cara, dos moretones debajo del ombligo e hinchazón, hematomas, enrojecimiento y rasguños en los genitales.
Los profesionales médicos dijeron que las lesiones de ambos niños no eran naturales y eran indicativas de abuso.
Actualmente, no hay ninguna mujer en el corredor de la muerte en Pensilvania, y el gobernador demócrata Josh Shapiro había prometido no firmar ninguna sentencia de muerte mientras esté en el cargo.
Con información de Pittsburgh Post-Gazette
