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El asesinato de la estudiante de enfermería Laken Hope Riley ha aumentado las críticas a inmigrantes indocumentados, debido al estatus migratorio del sospechoso, José Antonio Ibarra, quien se encuentra detenido
En X, antes Twitter, y otras redes sociales se ha vuelto trending topic la etiqueta “illegal alien” (extranjero ilegal), en referencia a un indocumentado acusado de asesinar a una estudiante de enfermería de 22 años tras salir de la Universidad de Georgia.
Laken Hope Riley fue encontrada muerta alrededor de las 12:30 p.m. del viernes. por la policía universitaria en una zona boscosa, detrás del lago Herrick, reportan medios locales.
Su búsqueda ocurrió luego de que amigos llamaran a las autoridades para reportar que Riley no había regresado a casa.
El sospechoso del crimen, José Antonio Ibarra, de 26 años, fue detenido. En un inicio el jefe de la policía universitaria, Jeff Clark, indicó que se trataba de un ciudadano extranjero, pero no dio detalles sobre su estatus migratorio.
“No tenían ninguna relación. Él no la conocía en absoluto. Fue un crimen de oportunidad”, dijo Clark en una conferencia de prensa.
Riley era estudiante de tercer año en la Facultad de Enfermería de la Universidad de Augusta y asistió a su campus satélite para un semestre en la primavera. Era originaria de Woodstock, Georgia.
Los reportes indican que la estudiante había salido a trotar dentro del campus universitario, pero no volvió a su residencia, por lo cual un amigo llamó a la policía, quien la encontró con “heridas visibles”; médicos que atendieron la llamada de emergencia certificaron su muerte.
Ibarra se encuentra en prisión sin derecho a fianza, en espera de que un juez lea los cargos y él decida si se declara o no culpable.
Ibarra no es ciudadano estadounidense, pero su estatus migratorio sigue sin ser confirmado, aunque varios periodistas en Twitter afirman que no tiene documentos de estancia.
El sospechoso es originario de Venezuela, se indicó.
La situación migratorio abonó a quienes critican a inmigrantes indocumentados en EE.UU., como la representante republicana Marjorie Taylor Greene (Georgia), quien hizo un llamado en la plataforma X para terminar con el estatus de “ciudad santuario” a Atenas, la ciudad donde se cometió el crimen.
Atenas, Georgia, es una ciudad santuario que brinda un puerto seguro a los extranjeros ilegales. ¡No debería haber ciudades santuario en el estado de Georgia!”, dijo Greene. “Hago un llamado a nuestra legislatura estatal controlada por los republicanos y a nuestro gobernador Brian Kemp para que pongan fin a las ciudades santuario en Georgia”.
En Nueva York han aumentado también las críticas a inmigrantes, luego de la golpiza que un grupo de extranjeros de origen venezolano golpearon a oficiales del NYPD en Times Square.
Hay otros casos a nivel nacional que inmiscuyen a inmigrantes y han abonado a las críticas.
El representante republicano, Derrick Van Orden (Minnesota), defendió haber votado por una ley federal que ordenaría la deportación inmediata de inmigrantes indocumentados que sean descubiertos manejando bajo la influencia del alcohol (DWI, en inglés).
“Voté a favor de que se deportara a los extranjeros ilegales con DWI. Esta es la razón. Tres niños todavía tendrían a su papá si este tipo hubiera sido expulsado del país. ¿Cómo crees que habrían votado los demócratas que se presentaron contra mí? Yo ya lo sé y tú también”, escribió el republicano.
Una familia con problemas legales
Los familiares de Ibarra enfrentan también otros problemas, ya que su hermano Diego Ibarra, de 29 años, fue interrogado por la muerte de Laken Riley, reveló el Departamento de Justicia.
Durante su interrogatorio se descubrió que tenía una falsa Green Card, por lo cual enfrentará un proceso federal.
El padre de Ibarra, dijo el Departamento de Justicia, también tiene arrestos previos en Georgia.
